
Representantes de 184 países debatieron en Ginebra un acuerdo internacional para frenar la contaminación plástica; la Argentina mantiene una postura alineada con Estados Unidos
La ONU Medio Ambiente alertó sobre la necesidad de una gestión sostenible del plástico, considerando todo su ritmo de vida
Residuos21/12/2020El organismo señala además que medidas para prohibir o reducir el consumo de plásticos desechables ayudan a combatir también la contaminación del aire. Y es que, la incineración de residuos plásticos a cielo abierto es una de las principales fuentes de contaminación del aire. En torno al 12% de la mayoría de los residuos sólidos municipales se hace de plástico, de un tipo u otro, y el 40% de toda la basura del mundo se quema, de acuerdo con el estudio contaminantes tóxicos de la basura plástica.
La quema de plásticos libera gases tóxicos en la atmósfera, como dioxinas, furanos, mercurio y bifenilos policlorados (más conocidos por la sigla PCB), y representa una amenaza a la vegetación ya la salud humana y animal.
Las dioxinas se depositan en plantaciones y en nuestros cursos de agua, donde acaban entrando en nuestros alimentos y, consecuentemente, en nuestros cuerpos. Estas dioxinas son contaminantes orgánicos persistentes y potencialmente letales que pueden causar cáncer y perjudicar la tiroides y el sistema respiratorio.
Los ftalatos - sustancias químicas que dan al plástico algunas de sus características más apreciadas, como flexibilidad y suavidad - son disruptores endocrinos, asociados a una variedad de complicaciones de salud, desde problemas de fertilidad y problemas neonatales entre bebés hasta alergias y tipos de asma.
La quema de la basura plástica aumenta el riesgo de enfermedades cardíacas, agrava enfermedades respiratorias, como asma y enfisema, causa irritaciones en la piel, náuseas y dolores de cabeza, y perjudica al sistema nervioso, afirma el estudio.
La quema de plástico también libera el carbono negro, en forma de hollín, que contribuye con el cambio climático y la contaminación del aire.
En todo el mundo, se están haciendo esfuerzos para reducir la cantidad de basura de plástico que acaba en los rellenos sanitarios o en nuestros océanos. En marzo de 2019, la Unión Europea aprobó una ley para prohibir hasta 2021 muchos artículos de plástico desechable, como los cubiertos de plástico, platos desechables, canudos y bastoncillos de globos.
La contaminación del aire es tema del Día Mundial del Medio Ambiente de este año, que se celebra el 5 de junio. La calidad del aire que respiramos depende de las elecciones que hacemos todos los días.
Fuente: Signis Alc (.org)
Representantes de 184 países debatieron en Ginebra un acuerdo internacional para frenar la contaminación plástica; la Argentina mantiene una postura alineada con Estados Unidos
El país produce 45.000 toneladas de residuos al día, y gran parte termina en basurales a cielo abierto que liberan gases de efecto invernadero y afectan la salud
Voluntarios de toda Sudamérica monitorearon 179 playas en 10 países y descubrieron que el litoral peruano mantiene niveles críticos de contaminación costera
Utilizan nuevos biomateriales para fabricar empaques y packaging sin plástico. ¿Hay oportunidad en el mercado local e internacional para estos productos?
La ONG Desierto Vestido, junto con otras organizaciones, crea una plataforma que recupera las prendas de segunda mano abandonadas para regalarlas a consumidores
La Selva Amazónica es responsable de hasta el 70 por ciento del agua que sirve a la generación hidroeléctrica de Brasil. De ahí, la relevancia de impedir su deforestación y estudiar los patrones climáticos
La riqueza de sus tierras pone a un pueblo del archipiélago de las Molucas entre la espada y la pared
Centros de datos del Reino Unido consumen hasta 10.000 millones de litros de agua al año: autoridades promueven “decluttering digital” como medida de ahorro
La Corte Suprema ordenó frenar la explotación petrolera y activar un plan de recomposición ambiental; la causa fue iniciada por vecinos
Algunas islas incluso se enfrentan a la sombría posibilidad de ser abandonadas o hundirse bajo el océano. Esto plantea una pregunta jurídica sin precedentes: ¿pueden estas pequeñas naciones insulares seguir siendo consideradas estados si su territorio desaparece?