
La transición energética es, sin duda, una de las mayores prioridades globales del siglo XXI. Sin embargo, en medio de este fervor por un futuro verde, surge una pregunta incómoda: ¿Estamos ante una burbuja en el sector de las energías limpias?
En los últimos 10 años con el advenimiento de la electro-movilidad, la demanda se disparó a nivel mundial y un producto que estaba en los u$s 200 la tonelada, pasó a costar hoy 6000 por tonelada con picos que llegaron a los u$s 9000
Energía renovable07/07/2021
La Argentina, Bolivia y Chile comparten el área de salares más importante del planeta, concentrando el 80% de las reservas de Litio. De esas reservas la Argentina posee aproximadamente el 30%, lo que representa una gran oportunidad para la industria energética del país.
La producción mundial de Carbonato de Litio en 2019 fue de 120.000 toneladas, siendo nuestro país el tercer productor mundial con 50.000 toneladas y un crecimiento exponencial desde el 2017 a la fecha. Hoy la Argentina, al ritmo presente de explotación, tiene reservas indicadas e inferidas para más de 80 años.
¿Para qué se lo utiliza actualmente? El Litio fue utilizado en el pasado para la industria del vidrio, la óptica, las cerámicas y algunas aplicaciones en medicina. Pero el salto tecnológico que se produjo al reemplazar las baterías de Nickel (Ni) Cadmio (Cd) en la industria de las comunicaciones y electrónica (Celulares, Pc, Notebooks etc.) generó un aumento de su demanda.
En los últimos 10 años con el advenimiento de la electro-movilidad, la demanda se disparó a nivel mundial y un producto que estaba en los u$s 200 la tonelada, pasó a costar hoy 6000 por tonelada con picos que han llegado a los u$s 9000.
Pero el uso del litio no solo se reduce a las baterías. El Litio interviene en diversas superlaciones (mezcla homogénea de dos o más elementos que exhibe una excelente resistencia) con el Aluminio (Al), Cobre (Cu), Zirconio (Zr), y Magnesio (Mg) y Plata (Ag). Estas aleaciones especiales se utilizan en las aspas de los generadores eólicos de alta potencia, en blindajes militares y chalecos antibalas, o en aplicaciones aeronáuticas comerciales y espaciales.
Por citar algunos ejemplos, la aleación Al-Li-Ag con 3% de Litio y 0.3% Plata, se emplea en los estanques de combustibles exteriores de los transbordadores espaciales de la NASA, ya que tiene excepcionales propiedades criogénicas para el oxígeno e hidrógeno líquidos. También el hidróxido de litio se emplea para captar CO2 en submarinos y naves espaciales. Otro ejemplo es el butil-litio, que es empleado en la elaboración del caucho sintético para la industria del neumático urbano o industrial. Este se utiliza intensivamente en los vidrios de bajo coeficiente de dilatación térmica para pantallas de televisión, pantallas de computadoras y celulares.
Todas las aplicaciones de los materiales a lo largo de la historia de la humanidad han sido utilizadas por un periodo determinado hasta que la evolución del conocimiento determinó su sustitución por otro material más apto y menos costoso. Estos saltos tecnológicos que se manifestaron desde la edad de piedra, bronce y hierro, se han ido intensificando después de la industrialización y cada vez son más frecuentes en el tiempo. En las baterías, el uso del litio desplazó al carbón activado en menos de 40 años, por lo que solo es cuestión de tiempo para sustituir el Litio como elemento central en el almacenamiento de energía eléctrica, por algún otro sustituto.
En ese sentido, cabe preguntarnos: ¿Es sustentable su extracción? La salmuera que se extrae por debajo de la capa solida de un salar está compuesta por un conjunto de sales disueltas en agua. Una vez separado el litio del agua, se obtienen tres partes de Carbonato de Litio y una parte de Cloruro de Sodio (o sal común) que se regresa al salar, por lo que no se genera ningún tipo de impacto ambiental.
El Litio es considerado el "nuevo oro blanco" por la importancia de sus aplicaciones basadas en los últimos desarrollos de tecnologías limpias y sustentables. Aunque su uso futuro más importante estará en la generación de energía mediante plantas de Fusión Nuclear.
Estas plantas, hoy en pleno periodo de prueba, podrán representar la fuente más limpia y segura de energía eléctrica jamás construida y sustituiría definitivamente a las fuentes de combustible fósil. El Litio podría resolver en forma definitiva el problema energético, ya que un kilo de litio metálico generará tanta energía como 54,000 barriles de petróleo, sin generar Gases de Efecto Invernadero (GEI) y sin ningún riesgo de incidentes por radioactividad.
 
Fuente: Cronista (.com)

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